Tipos de tratamientos para las manchas solares

Las manchas solares hay que tratarlas en los meses en los que el sol no es tan intenso, porque los productos que se utilizan requieren de protección solar constante. Y mantener los cuidados durante el verano para evitar que crezcan o salgan otras nuevas.

Aparecen habitualmente en la piel expuesta al sol, sobre todo la cara, brazos y manos y escote, por el exceso de melanina, que es el pigmento que da color a nuestra piel, cabello y ojos.

Ante todo os recomiendo que visiteis a un dermatólogo para que os asegure que no tengais alguna otra patología. A veces pueden ser lunares, marcas de nacimiento, queratosis o, ya en un caso más extremo, cáncer de piel, y no se considerarían manchas por hiperpigmentación. Otras son consecuencia de tratamientos abrasivos o provocadas por el acné, cuyo tratamiento es muy diferente. Si estás preocupada por tus manchas oscuras o éstas son nuevas, cambian de tamaño o color, te producen picor o sangran, no dudes en consultar inmediatamente a un médico o farmacéutico.

Una vez descartadas las causas anteriores, lo más importante es saber por qué se producen y tomar medidas preventivas ante el sol durante todo el año:

  1. Evitar exposiciones directas y sobre todo entre las 12-16h del día pues es cuando los rayos son más agresivos. 
  2. Usar fotoprotectores igual o superior a FPS 50, durante todo el año pero especialmente en verano. Las cremas fotoprotectoras con pantalla física siempre darán una protección solar más notable que las de filtro químico.
  3. Usar cosméticos libres de perfumes que pueden manchar la piel y productos abrasivos que vulneran la piel y nos predisponen a una mancha mayor.

¿Qué tratamientos hay?

En farmacia tenemos diferentes tratamientos  para ayudar a difuminar las manchas en la piel. Recomendamos el uso conjunto y pautado de blanqueantes y  peelings.

  1. Blanqueantes:  a base de hidroquinona 2-4%, sola o en combinación con ácido glicólico, ácido retinóico, ácido kójico, entre otros. Se recomienda tratamientos de 3 meses (1 vez / día) y seguir con periodos de mantenimiento.
  2. Peeling: substancias queratolíticas, como ácido salicílico y ácido glicólico, preparan la piel para un máximo resultado del blanqueamiento. El mejor momento para realizar el peeling es por la noche, pues al quitar las capas más superficiales de la piel dejamos a esta expuesta y sensible.
    En verano se aconseja descansar de estos tratamientos por un riesgo de irritación cutánea que puede producir aumento de la mancha. Sin embargo, la fotoproteccion debemos utilizarla todo el año.
  3. Fotoprotección: Cremas o emulsiones solares con FPS 50 o superior. Las cremas fotoprotectoras con pantalla física siempre darán una protección solar más potente que las de filtro químico. Los laboratorios de farmacia incluyen ya fórmulas específicas para pieles pigmentadas.

Tu dermatólogo también podrá proponerte tratamientos con láser, suelen ser tratamientos caros, de eficacia variable y a menudo inferior a los tratamientos tópicos blanqueantes. Hay varios tipos:

  • Láser Alejandrita, Rubí o Nd: YAG de emisión en Q-Switched: baja eficacia y riesgo de hiperpigmentación post-inflamatoria y recidivas.
  • Láser fraccionado: resultados aceptables, pero no evitan las recidivas.
  • Luz intensa pulsada: resultados aceptables.

Todos estos tratamientos han de combinarse con los preventivos y de blanqueamiento. Tras realizarlo, necesitarás cuidar la piel para prevenir la aparición de nuevas manchas.

Si tienes más preguntas o necesitas asesoramiento personalizado, ven a visitarnos y te aconsejaremos lo mejor para tu piel.

Soy Maria Olaya y puedes encontrarme por las mañanas en @mtfarmacia