La exposición de los medicamentos a la luz directa y a las altas temperaturas puede alterar su fórmula comprometiendo su efectividad. En ciertas formas farmacéuticas como las cremas, supositorios u óvulos las alteraciones a simple vista son más fáciles de detectar: la consistencia es muy blanda, al cogerlos se deshacen entre los dedos, la apariencia de la mezcla ya no es homogénea y se separa la parte más cremosa de la líquida, el color no es el habitual, huele a rancio, etc.
Hay productos en los que detectar un cambio no es tan fácil y no podemos determinar sí su composición se ha visto alterada por un exceso de luz o calor. Ante la duda, te recomendamos desecharlos ya que algunos activos pueden perder su eficacia y en casos más extremos, causar reacciones adversas al ser utilizados.
¿Cuál es la temperatura ideal?
La que indique el fabricante, puedes encontrarla en un costado de la caja o dentro del prospecto del medicamento.
Si especifica entre +2ºC y +25ºC puedes almacenarlos en un lugar fresco y seco de tu casa, como puede ser en una caja dentro de un armario, dentro de un cajón en una cómoda o en un compartimento cerrado de una estantería. Durante todo el año, evita zonas como los baños o las cocinas, donde hay más humedad y las temperaturas son más elevadas.
Si el fabricante indica entre +2ºC y +8 ºC debes almacenarlos dentro de la nevera. Mejor si los ubicas hacia el fondo de una de las baldas donde la temperatura es más constante. No los coloques en la puerta ya que la temperatura varía cada vez que la abres.
Si necesitas transportar medicación que va en nevera te recomendamos que utilices un estuche resistente a las temperaturas. En nuestra farmacia puedes incluir en tu compra una bolsa isotérmica con un acumulador de frío, así cuidamos que tu tratamiento se conserve bien hasta que llegues a casa.
¿Qué hago si hay una ola de calor a más de 30ºC en mi ciudad?
No tienes que hacer nada, solo asegúrate que tus medicamentos se encuentran en un espacio en donde no reciban luz directa y sea una de las zonas más frescas de la casa. Aunque en el exterior la temperatura pueda superar los 35ºC o 40ºC, en las viviendas las máximas suelen ser mucho menores y es en momentos puntuales.
Si llevas medicamentos en el coche, nunca los ubiques en el maletero o en los compartimentos expuestos a la luz directa, en estos lugares el calor suele ser mucho mayor y pueden verse afectados. Un buen lugar es el compartimento entre los asientos del piloto y del copiloto, o debajo de estos asientos.
Si llevas medicación dentro del bolso, una mochila o en el cochecito del bebé, ubícalos en la parte más interna, en donde estén protegidos de la luz directa del sol. Si vas a la playa con ellos, colócalos bajo la sombrilla o en un lugar con sombra.
Resumiendo,
- Observa la temperatura recomendada por el fabricante en el prospecto o la caja.
- Coloca tus medicamentos en un lugar fresco y seco, lejos de la luz directa del sol, intentando evitar las zonas de la cocina y los baños.
- Los medicamentos que deban conservarse entre +2ªC y +8ºC guárdalos en la nevera, evitando la puerta.
- Si notas algún cambio en la consistencia o apariencia de la fórmula, no los utilices. Llévalos a un Punto SIGRE para su
- Si dejas medicamentos en el coche, evita el maletero y los compartimentos expuestos a la luz directa.
Soy Helena y espero que estas recomendaciones te sean útiles para mantener tus medicamentos en óptimas condiciones. >>> Consúltanos si tienes más dudas!
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Referencias bibliográficas
- Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) Agosto, 2019. La AEMPS recuerda cómo conservar los medicamentos en verano. Categoría: Medicamentos de uso humano. Referencia: MUH, 21 /2019.