Seguro que has oído hablar del aloe vera y lo has utilizado en más de una ocasión. Pero, ¿sabes todos los beneficios que puedes obtener de un buen gel de esta planta medicinal?
¿Cómo se obtiene?
El Aloe Vera, de la familia de las Asphodelaceae, pertenece al género Aloe, que cuenta con más de 350 especies vegetales. Las plantas de este género han sido utilizadas desde la antigüedad en la medicina tradicional de muchos países y su uso puede documentarse ya en las civilizaciones más antiguas. Actualmente, la especie más popularizada es el Aloe vera L (Aloe barbadensis Miller), originaria de Barbados y cultivada en países de clima cálido. También es de interés el Aloe ferox Miller, llamado Aloe del Cabo, que se cultiva en África.
A partir de estas dos especies se obtienen dos productos distintos, el aloe o acíbar, que se extrae mediante incisiones en la epidermis de las hojas frescas y que es rico en derivados hidroxiantracénicos de efectos laxantes, y el gel de aloe, sustancia mucilaginosa que se obtiene a partir de la pulpa de las hojas de A. barbadensis, cuyos principales constituyentes son polisacáridos de elevado peso molecular y que se emplea en higiene, cosmética y en el tratamiento de diversos problemas de la piel, ya que es capaz de penetrar en las tres capas epidérmicas de la piel (epidermis, dermis e hipodermis).
¿Para qué sirve?
De los estudios publicados en los últimos años se desprende que el gel de aloe vera es muy eficaz en la cicatrización de heridas, quemaduras de primero y segundo grado, quemaduras solares, eczemas, dermatitis agudas, irritaciones y abrasiones de la piel, favoreciendo la hidratación, cicatrización y regeneración de la misma y reduciendo la inflamación y el dolor.
También es muy utilizado como aftersun o forma parte de la composición de muchos productos para aplicar tras la exposición solar, ya que ayuda a reducir la oxidación y la irritación tras el sol. Es un aftershave o loción para después del afeitado natural, y es el principal ingrediente en líneas de higiene y cuidado corporal para pieles sensibles por sus propiedades hidratantes y emolientes. Sus nutrientes (es rico en vitaminas, aminoácidos y minerales) también lo hacen apto para productos capilares que tengan como objeto fortalecer cabellos secos.
Como digestivo, se utiliza para combatir el estreñimiento, pero en un tratamiento de pocos días y siempre bajo prescripción de tu especialista.
No es aloe todo lo que parece
La calidad y eficacia del gel de áloe viene condicionada por su contenido y composición en polisacáridos, que varía según los ciclos vitales de la planta y las variaciones climáticas a que se ve sometida. Por ello es esencial utilizar productos en los que la calidad del aloe esté garantizada desde el cultivo y la recogida hasta el producto final.
Cualquier producto que se publicite como aloe, no tiene porque serlo al 100% fíjate en la composición y en las garantías que te ofrece el fabricante. Además, el gel debe estar libre de derivados hidroxiantracénicos, ya que éstos pueden provocar alergias, dermatitis de contacto e incluso fotodermatitis (alteraciones de la piel producidas por las radiaciones UV del sol). Comprueba que adquieres un producto hipoalergénico.
Si se hace un uso casero de la planta debe aplicarse sobre la piel la parte central de la pulpa, evitando la que está bajo la corteza ya que puede contener sustancias causantes de alergias, dermatitis y fotosensibilización.
En la farmacia te podemos aconsejar los laboratorios que mejor tratan el proceso de extracción y recogida, obteniendo un aloe de mayor calidad y con una pureza del 99%. Además tenemos dos productos (un gel de baño y un gel hidratante) de nuestra propia marca que te encantarán. ¿No los has probado todavía?
¡Ven a pedirnos consejo y te ayudaremos encantados!
Equipo mtfarmàcia