Ventajas de la alimentación BIO para tu bebé

Optar por alimentación BIO para tu bebé es, por un lado, compartir con él un equilibrio de vida que prefiere la biodiversidad al monocultivo, la utilización de abonos naturales y el producto de cercanía. Por otro, aporta seguridad a los padres, ya que controlan la calidad de los alimentos que toman los peques, que además se acostumbran a sabores más naturales.

Ingredientes diferentes

La alimentación BIO  tiene un mayor valor nutricional para el niño, al tratarse de comida fresca y madurada al sol. Laboratorios como BabyBio o Smile Eat, con el que trabajamos en nuestra farmacia, tienen un abanico de ingredientes mayor que otros e incluyen la quinoa, con una textura muy agradable para los niños, la patata dulce, el brócoli, los arándanos y la vainilla, que tiene un sabor que les recuerda a la leche materna y les relaja. Además, evitan el kiwi o el apio (que causan muchas alergias a niños) y tienen recetas sin huevo, sin leche o sin gluten para adaptarse a cada niño.

Uno de los favoritos de los papis es el Buenas Noches, con calabaza, arroz y zanahoria, muy equilibrado al mezclar legumbres con cereales, conteniendo una proteína de alto valor biológico porque contiene todos los aminoácidos esenciales.

Las recetas están supervisadas por pediatras y lo alimentos se adquieren a pequeños productores con los que la marca francesa establece una relación duradera. Son proveedores de Francia, España, Italia y otros países europeos de regiones muy concretas (utilizan por ejemplo, trucha salvaje de Irlanda o manzanas de la región de Aquitania).

Recetas estacionales y muy completas

Por encima de los potitos envasados, la mejor opción es siempre prepararlos en casa, comprando productos de cercanía que tenga la etiqueta BIO e informándote bien acerca de las recetas más apropiadas para cada momento del día y los ritmos naturales de cada estación del año.

En invierno, por ejemplo, te recomendamos una merienda con manzana, pera y naranja, para estar en harmonía con la producción y por su aporte vitamínico. En verano, escoge melón, melocotones o sandía, frutas más frescas con más agua y mineralizantes.

Pero, si no dispones del tiempo que requiere, la alimentación BIO de bebé es una buena opción ya que trabaja con procesos físicos simples para conservar la fuente nutritiva del alimento sin necesidad de sustitutos de síntesis pero, al mismo tiempo, adaptándolos a las necesidades digestivas de los bebés. Recuerda buscar siempre un certificado que lo autentifique.

¿Y las leches?

La leche que mejor cuida las necesidades nutricionales del bebé hasta los 6 meses es la de la madre, pero si no puedes o no quieres dar el pecho de 0 a 6 meses existen alternativas a la lactancia materna también orgánicas a partir de leche de vacas o cabras alimentadas con pasto o forraje orgánico y no tratadas con antibióticos. Hipp, BabyBio o Holle son algunas de las leches de referencia.

Zumos de manzana o multifrutas sin azúcares añadidos, galletas para la dentición, yogures, preparados de fruta,… Hay muchas opciones para tu bebé en las farmacias y establecimientos de alimentación ecológica. Pero recuerda: busca siempre el sello verde de la Unión Europea y el certificado ECOCERT para estar 100% seguro de lo que come tu hijo.

Emi Juárez, Carlos Mauricio y Montse Barba