La higiene íntima es diferente en las diferentes etapas de la mujer y fundamental en momentos clave como el post-parto, tanto si tu parto ha sido vaginal como si has tenido una cesárea. Te lo explicamos en estos 10 puntos:

1.En el post-parto, ¿cómo cambia nuestro pH vaginal y por qué?

En el post parto, los loquios (secreciones vaginales), el líquido amniótico y la sangre hacen que disminuya la acidez de la vagina, es decir que se haga más básica permitiendo que sea más fácil el acceso a los organismos patógenos (virus, bacterias,…, que puedan causar alguna enfermedad). También fisiológicamente queda expuesto al exterior el útero y el cuello uterino. Todo esto, junto con la humedad genital, hace  que la zona esté más expuesta a sufrir infecciones por bacterias, hongos…

El restablecimiento de la flora vaginal es el mejor mecanismo de defensa frente a los microorganismos patógenos ya que mantienen el pH vaginal ácido. El pH es el coeficiente que indica en qué grado es ácida o básica una solución acuosa.

2. ¿Qué son los loquios?

Los loquios son secreciones que se expulsan en los primeros días posteriores al parto, incluso 10 días después del parto. Está compuesto por restos de las paredes del útero, moco cervical, secreciones vaginales (coágulos) y sangre. Su forma es parecida a la de la menstruación, los tres primeros días son abundantes, puede durar varias semanas reduciendo su cantidad hasta desaparecer. En cada mujer son más o menos abundante y pueden durar más o menos tiempo.

3. ¿Es normal el sangrado tras el parto?

Después del parto se produce el típico sangrado que puede ir o no acompañado de loquios. La herida que queda en el útero al desprenderse la placenta es la causante de este sangrado, por eso es importante que el útero vuelva a su sitio para no desangrarnos. Esta primera  maniobra la hace el ginecólogo  una vez se ha dado a luz y luego de manera fisiológica cuando damos el pecho se siguen teniendo contracciones que favorecen esta disminución del útero y de esta manera disminuye el riesgo de hemorragia.

4. ¿Debemos utilizar algún tipo de producto especial de higiene íntima?

Utiliza una solución limpiadora o jabón  que haya sido desarrollada bajo control dermatológico y ginecológico, y que presente una buena tolerancia cutánea y vaginal. Para ello no dudes en preguntarnos. Éstos son algunos de los que solemos recomendar en nuestra farmacia:

-Epixelle, es una solución limpiadora para el cuidado y la recuperación cutánea, indicado en posparto, para posibles desgarros, episiotomías o cesáreas. Es antiinflamatorio, ayuda a la cicatrización de la cicatriz, también actúa como antiséptico para evitar infecciones.

-Saforelle, cuidado íntimo y corporal sin jabón de las pieles sensibles e irritadas. Con extracto de Bardana.

- Esponjas jabonosas de un solo uso de pH neutro.

-Jabón íntimo Suavinex.  Con ácido láctico y extracto de caléndula.

5. ¿Podemos usarlo inmediatamente después del parto o hay que esperar un tiempo?

Mientras estés encamada, la higiene intima la realizará el personal sanitario dado que seguramente en las primeras horas no te puedas mover mucho por los efectos de la epidural. En cuanto puedas levantarte e ir al baño, ya puedes realizar la higiene por ti misma. Se recomienda hacer el  lavado con esponjas jabonosas tantas veces como se necesite siempre con agua fría (ésta aliviará la sensación de quemazón y ardor de la zona íntima además de sentirte más cómoda). Sobre todo sécate siempre muy bien la zona o bien a toques con una gasa o toalla de algodón o con el secador. Si puedes, déjala al aire unos minutos.

La higiene debe ser solo externa y evitando el baño en bañera para minimizar el riesgo de infecciones.

6. Si te han realizado una episiotomía, ¿cuáles son los cuidados que debes llevar a cabo?

Hay  muchas mujeres que no sufren desgarros pero otras que a las que durante el parto se les hace episiotomía. En este caso, deberemos vigilar los puntos y condicionar ciertos movimientos por el dolor de la herida. Suelen tardar entre 1 y 2 semanas en cicatrizar y se absorben solos.

Y mantener una cuidadosa higiene de la zona vaginal, tantas veces como sea necesario. Siempre hay que lavarla suavemente y hacerlo desde de la vulva hacia el ano, para evitar contaminar la vagina. Secar muy bien la zona como ya hemos dicho anteriormente a toquecitos o incluso con el secador de pelo, para evitar tocar la zona.

También es aconsejable:

• Evitar ropa ajustada en la región perineal (braguitas muy ajustadas, vaqueros…)
• Evitar el estreñimiento.
• Cambiar las compresas frecuentemente para evitar la humedad y riesgo de infecciones.
• Y hacer las curas pertinentes que te haya indicado el especialista cada vez que vayas al baño.

7. ¿Se pueden utilizar compresas o tampones como los habituales?

Tras el parto hay que utilizar compresas tocológicas. Son  compresas específicas con una gran capacidad de absorción, su tamaño es mayor que las normales. Están compuestas de algodón y no tienen plástico, de este modo permiten una buena transpiración y reducen el riesgo de sufrir algún tipo de infección.

Nunca debes utilizar tampones en el posparto. Las paredes vaginales están dañadas por el parto y nos resultará dolorosa su colocación, además de en caso de tener sutura (puntos) puede dañarlos. También retienen el flujo y la humedad que producimos de forma natural pudiendo provocar infecciones. Es importante que se vayan eliminando los restos.

Se recomienda el cambio muy frecuente de compresa, con el fin de mantener la zona más limpia y “seca”.

8. ¿En qué casos hay que preocuparse o acudir al médico en caso de sangrado?

Si la hemorragia vaginal es abundante e  incontrolable, hay un descenso de la presión arterial, aumento de la frecuencia cardíaca, fiebre, dolor pélvico, o sensibilidad uterina que no cesa. También si se abriese algún punto o notase que la herida está abierta o purulenta.

9. ¿Qué otros cambios puede experimentar nuestra zona íntima durante el postparto?

• Cambios morfológicos benignos de las células del epitelio uterino.
• Cambios en la morfología de la vagina, pueden aparecer hematomas debidos a la gran vascularización (presencia de vasos sanguíneos y tejidos).
• Fisuras anales y hemorroides.
• Pérdida de tono de la musculatura del suelo pélvico con el consiguiente riesgo de pérdidas de orina.

10. ¿Cómo debe ser la higiene íntima en caso de cesárea?

Hay que mantener limpia la cicatriz durante la ducha diaria, pero sin frotar, utilizar jabón o quitar los apósitos o tiras que te hayan puesto en el hospital hasta que te lo hayan indicado. Las secreciones vaginales o loquios son comunes a las del parto vaginal y se cuidan de la misma forma.

Soy Laura Cerezuela y puedes encontrarme todas las tardes en mtfarmàcia.