¿Cuándo es recomendable hacer una dieta détox?

Hoy en día los países desarrollados cuentan con una población expuesta de forma continua a tóxicos (ambientales, alimentos con aditivos, estrés, plásticos, carburantes, medicamentos, empastes e implantes, entre otros).

Esta forma de vida no es la más natural ni sana pero es nuestra forma de vida. Debemos entender que casi todo lo que usamos o consumimos diariamente presenta tóxicos en mayor o menor grado y nuestro cuerpo trabaja a diario procesando y expulsando estos tóxicos pero al haber tanta cantidad se satura y se resiente. Es por ello que una detoxificación es una ayuda extra que le vendrá bien para acabar de depurar el organismo.

¿Qué es la detoxificación? ¿Qué órganos están implicados?

La detoxificación es un proceso que lleva a cabo nuestro organismo para deshacerse de sustancias tóxicas. Primero las detecta, las neutraliza, las empaqueta y las expulsa del cuerpo y para ello colaboran varios órganos:

  • El principal órgano de detoxificación es el hígado y en segundo lugar la microbiota intestinal. De hecho hoy día se considera la microbiota intestinal como un órgano más de nuestro cuerpo que desempeña multitud de funciones imprescindibles como la regulación del metabolismo, las defensas, la digestión y la detoxificación, entre otras. Hoy en día, existen multitud de estudios que demuestran que el segundo hígado del cuerpo es la microbiota intestinal pues es ella la encargada de procesar y reducir la carga tóxica de los alimentos antes de llegar por vena porta al hígado. Cuando la microbiota no puede procesar tanta carga tóxica, dicha carga pasa directamente a hígado saturando sus filtros con el tiempo.

  • Hay órganos, glándulas, tejidos corporales que se comportan como emuntorios, desagües de nuestro organismo por donde desechamos las toxinas y otros elementos de deshecho (sudor, orina,…) es importante tener despejados estos sistemas u órganos (pulmón, riñón, piel e intestinos) para que el cuerpo pueda deshacerse de las toxinas con éxito y evitar problemas locales por congestión del emuntorio y problemas generales a por sobrecarga tóxica.

¿Por qué es recomendable detoxificar el cuerpo?

Dada la elevada carga de tóxicos ambientales, a nuestro cuerpo le cuesta muchísimo detoxificarse de forma eficaz. Los tóxicos se acumulan en los filtros del cuerpo (intestinos, hígado y riñones) entorpeciendo el trabajo de estos órganos y fatigando nuestro organismo. Muchos tóxicos y metales pesados también se acumulan en los depósitos de grasa de nuestro cuerpo, incluido el cerebro que consta de un 60% de materia grasa. Estas sustancias dañinas no solamente fatigan a nuestro cuerpo sino que pueden originar o potenciar ciertas patologías. Es por ello que es recomendable, de forma genérica, detoxificar el cuerpo 1 o 2 veces al año.

 Xenobióticos, ¿Qué son y de dónde proceden?

Los xenobióticos, toxinas, son sustancias ajenas a nuestro organismo que resultan ser nocivas para este. Nuestro cuerpo tiene inercia a deshacerse de ellos pero como ya hemos mencionado con anterioridad, dada la elevada carga tóxica en nuestra sociedad, el cuerpo agradece una ayuda extra en el proceso de detoxificación.

Algunas sustancias xenobióticas, son:

  • Ambientales: diésel, nitratos, cadmio, arsénico, virus, bacterias,…

  • Laborales: estrés, wi-fi, aires acondicionados o climatizadores,...

  • Alimentos: plomo, mercurio, arsénico, pesticidas, herbicidas, plásticos,...

  • Medicamentos: anticonceptivos, antifúngicos, paracetamol,…

  • Implantes y empastes: mercurio, titanio,...

Es importante resaltar que nuestro propio cuerpo también genera sustancias nocivas que neutraliza habitualmente hasta que se satura, como son las que se originan tras estados como el estrés, enfermedades crónicas o inflamatorias así como disbiosis intestinal (desequilibrio de la flora intestinal). Estas sustancias, tóxicas para el propio organismo, no son consideradas xenobióticas pues no provienen del exterior sino del interior del cuerpo.

¿Quién es más susceptible de necesitar una detoxificación orgánica?

De forma genérica toda la población adulta, a partir de los 25-30 años, requiere detoxificar su cuerpo 1 o 2 veces al año como mínimo, sobre todo en otoño y primavera pues justo con el cambio de estación el cuerpo tiene inercia a depurarse y una ayuda por nuestra parte le vendrá bien.

Sin embargo existe un perfil poblacional que requiere una detoxificación a conciencia y bajo la supervisión de un especialista sanitario:

  • Todas aquellas personas que se medican de forma habitual o han estado tratados con medicación agresiva con el hígado o riñón

  • Las que viven o trabajan en zonas de elevada polución (grandes ciudades y zonas industriales).

  • Las personas que se alimentan con frecuencia de comida rápida, precocinada y/o rica en aditivos.

  • Los consumidores de frutas, verduras, cereales,…que provengan de cultivos en los que se hayan usado pesticidas o herbicidas

  • Personas que abusan del uso de plásticos en comida o bebidas (tuppers, botellas,...).

  • Personas que abusan de sustancias nocivas: tabaco, alcohol,…

  • Las que lleven empastes o implantes de origen metálico (mercurio, titanio,…).

  • Personas que utilizan en exceso ropa sintética y cosmética corporal rica en aditivos derivados del petróleo y/o parabenos.

De manera preventiva, los grupos anteriores deben cambiar hábitos de vida, siempre que sea posible y sí o sí en el caso de tabaco o el abuso del alcohol.

¿Cuándo es el momento ideal para iniciar la depuración? ¿Cuánto tiempo hay que hacerla?

Cuando nuestro organismo nos avisa de sobrecarga de toxinas por excesos puntuales (Navidad, Semana Santa…) o continuos (por un estilo de vida inadecuado). Los síntomas son:

  • Cansancio y fatiga.
  • Cambios de humor y depresión.
  • Cefalea o migraña (dolor de cabeza).
  • Retención de líquidos y mala circulación.
  • Problemas digestivos: malas digestiones y pesadez, gases, estreñimiento y/o diarrea.
  • Mal aliento.
  • Si existen problemas dérmicos: acné, rosácea, eczemas,…
  • Tras un tratamiento medicamentoso agresivo con el organismo, sobre todo con el hígado y riñón.
  • Tras excesos puntuales de comida y abuso de sustancias nocivas (tabaco, alcohol,…).
  • Con el cambio de estación (primavera y otoño).

Generalmente con 14-20 días de detoxificación tenemos suficiente aunque un profesional sanitario podría indicar hasta 30 días o más (meses) según el paciente y sus necesidades.

Siempre debes acudir a un especialista en nutrición para poner en marcha tu dieta detox y hacer un seguimiento de la misma.

Ahora que ya sabes qué es la detoxificación y por qué debemos hacerla, en mi siguiente post, te hablaré más en concreto de la dieta détox y los alimentos y complementos que nos ayudan a llevarla a cabo.

Soy María Olaya y puedes encontrarme por las mañanas en mtfarmàcia.